Una noticia que no quiero oir

Existen varias cosas las cuales no queremos ver o que nos sucedan; tambien noticias las cuales no quisieramos oir nunca.

Piense por un momento sobre todas las cosas que no quisiera que le acontecieran jamás.

Primero, lo que la gente hoy día tiene más pendiente
, ECONOMÍA. Estamos en un mundo cada vez más competitivo y el dicho de "tanto tienes, tanto vales" es más cierto que nunca. La gran mayoría de las personas son tratadas y catalogadas por la cantidad de posesiones materiales. ¿Cuales noticias sobre su economía no quiere recibir nunca; por ejemplo diría un inversionista: "se desploman las bolsas en todo el mundo" o "nuestra empresa ha tenido un mal año vamos a declarar la quiebra"

Una persona esperando a su hijo nunca quisiera escuchar "su hijo sufrió un accidente y ha muerto"

Una novia no quisiera recibir una noticia, ya en el artal: "tu novio no vendrá"

Un empleado con muchas necesidades no desea oir a su jefe: "estás despedido"

Nadie quiere escuchar de su doctor: "tienes una enfermedad incurable"

Alguien enemorado no quiere recibir una carta de rompimiento.

Así son miles de noticias las cuales son válidas en las diferentes circunstancias, pero yo no tengo cuidado de ninguna de ellas, porque en cualquier momento las podemos recibir y la mayoría de ellas podríamos encontrar soluciones y no seremos afectados eternamente.

En cuanto a mi, solo me preocupa una noticia la cual nunca quiero ni remotamente escuchar:

Un día, una tarde o una noche:"CRISTO VINO"

Por eso lavo mis ropas cada día en la sangre del CORDERO, el cual me hace salvo por la fe para que ese día mis oidos oigan: "VENID BENDITOS DE MI PADRE A LA GLORIA ETERNA PREPARADA PARA VOSOTROS DESDE ANTES DE LA FUNDACION DEL MUNDO"

¡Cuán glorioso ha de ser ese día!

La Biblia dice: "en un momento, en un abir y cerrar de ojos; a la final trompeta.
   
        Tambien:
                         Porque el Señor mismo descenderá del cielo con voz de arcangel, con voz de mando y con trompeta de Dios y los muertos en Cristo resucitarán primero; y luego nosotros, lo que hemos quedado; seremos transformados, asi recibiremos al Señor en el aire y estaremos siempre con él" 

Usted quizá ha escuchado varias veces: Cristo viene, pero nunca ha escuchado: Cristo vino.

Bueno, somos dichosos y tenemos la oportunidad de nunca escuchar la noticia de que Cristo vino. Procuremos pues el favor de Dios rindiendo nuestras vidas a él y solo a él, creyendo en Jesucristo para perdon de nuestros pecados y confesandolo publicamente para salvación.

¿Y usted Quiere escuchar: CRISTO VINO o VENID BENDITOS DE MI PADRE?